Las colisiones entre peatones, ciclistas y vehículos comerciales siguen siendo, lamentablemente, una noticia frecuente en nuestras ciudades y carreteras. Muchos viandantes desconocen la magnitud de los puntos ciegos delanteros y traseros de los camiones, lo que puede provocar accidentes al no ser vistos por el conductor.
Gracias al avance de la tecnología y la incorporación de la Inteligencia Artificial (IA) en las cámaras, hoy es posible implementar sistemas de aviso pasivo y activo que ayudan al conductor a manejar el vehículo con un riesgo significativamente menor.
¿Cómo funciona la IA en las cámaras para vehículos?

Las cámaras dotadas de IA están programadas para detectar y reconocer la figura humana dentro de una zona de detección predefinida. De este modo, alertan al operario de la presencia de una persona y avisan al conductor mediante señales visuales y sonoras antes de que se produzca una posible colisión.
El sistema operativo de las cámaras utiliza algoritmos capaces de reconocer personas y partes del cuerpo humano. Cada dispositivo cuenta con una cámara HD con capacidad de procesamiento integrada, lo que le permite identificar si hay una persona dentro del rango de detección.
La instalación es sencilla gracias a su sistema plug and play, lo que la convierte en una solución ideal para grandes flotas. Además, la cámara cuenta con una clasificación IP69K, garantizando protección frente a polvo, altas temperaturas y agua a alta presión.
El cable adaptador de Brigade asegura que la cámara permanezca siempre encendida y que el tiempo de arranque sea nulo, permitiendo al conductor comprobar los puntos ciegos con total confianza desde el inicio de la jornada.
Valores añadidos de las cámaras de seguridad para vehículos con IA de Brigade
Uno de los principales valores añadidos de las cámaras con Inteligencia Artificial de Brigade es la reducción significativa de las falsas alarmas, ya que el sistema solo alerta cuando existe un riesgo real de colisión con un usuario vulnerable.
Además, las cámaras pueden configurarse para funcionar dentro de zonas de detección delimitadas. De esta forma, el operario recibe avisos únicamente si un peatón o ciclista entra en un área determinada. Esta opción de programación es especialmente útil, ya que permite definir diferentes niveles de alerta según el grado de peligro de cada zona, una ventaja muy valorada en maquinaria con áreas de riesgo elevado.

Otro avance destacado es el sistema bidireccional de aviso. No solo el conductor recibe una alerta al detectar a un usuario vulnerable, sino que también este puede ser advertido mediante una señal luminosa o acústica de que se encuentra en una zona peligrosa. Así, tanto el conductor como el peatón o ciclista son conscientes de la presencia del otro, minimizando el riesgo de colisión.
Modelos de las cámaras con Inteligencia Artificial
Existen diferentes modelos de cámaras que incluyen Inteligencia Artificial. Por un lado, existen cámaras delanteras y traseras con un rango de detección de 52º en horizontal y 30º en vertical, especialmente indicadas para vehículos rígidos. Por otro, las cámaras 360º con IA ofrecen un rango de detección de 180º, ampliando la cobertura y mejorando la seguridad en todo el entorno del vehículo.

Conclusión: la Inteligencia Artificial, una aliada en la conducción
La incorporación de la Inteligencia Artificial en los sistemas de asistencia a la conducción representa un paso decisivo hacia la reducción de accidentes y la mejora de la seguridad vial. Gracias a su capacidad para detectar y reconocer peatones, ciclistas y otros usuarios vulnerables, esta tecnología permite anticipar situaciones de riesgo antes de que se produzcan.
A medida que la IA continúa evolucionando, su integración en las carreteras y flotas será cada vez más habitual, marcando el comienzo de una nueva era en la movilidad inteligente.
