El Congreso de los Diputados aprobó el pasado 8 de octubre el Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible, una iniciativa que apuesta por una movilidad saludable, igualitaria e innovadora. Aunque su tramitación todavía está pendiente del Senado, todo hace pensar que se llevará a cabo y así poder acceder a más de 10.000 millones de euros en ayudas del Fondo Europeo.
Movilidad como un derecho social
Por primera vez se reconoce la movilidad laboral como un derecho de los trabajadores y, por lo tanto, exige responsabilidades a las empresas y administraciones.
El lema es claro: La movilidad es un derecho, no un privilegio.
Los datos son preocupantes. En 2024 se produjeron 55.000 accidentes “in itinere” (de movilidad laboral) que causaron más de 153 víctimas mortales.
La Ley de Movilidad Sostenible defiende que desplazarse al lugar de trabajo no debe ser un riesgo. Por ello, pretende garantizar el derecho a un trayecto seguro al lugar de trabajo mediante diferentes medidas como abonos sociales o la obligación de que las empresas de más de 200 empleados elaboren planes de movilidad para sus trabajadores.
Movilidad limpia y saludable
Apuesta por vehículos sostenibles en zonas urbanas para el transporte público, incentivar la movilidad a pie y en bicicleta y el apoyo a personas que se encuentran en situaciones de diversidad funcional.
Las administraciones públicas promoverán fuentes de energía sostenibles para el servicio de transportes y combatir de este modo las emisiones de gases de efecto invernadero.

Sistema de transporte digital e innovador
Apuesta por la digitalización y datos abiertos para ofrecer mayor información a los pasajeros en términos de transporte. Se promueve a su vez un espacio delimitado y supervisado para experimentar con otros vehículos como drones o vehículos autónomos, con el fin de promover nuevas formas de movilidad.
Conclusión
La Ley de Movilidad Sostenible marca un paso decisivo hacia un modelo de transporte más justo y respetuoso. Refuerza la responsabilidad de las empresas y administraciones en garantizar desplazamientos laborales seguros, apostando por la innovación y la digitalización del sistema de transporte.




